El futuro de la portería del Inter de Milán podría pasar por un ex de la Masia del Barça

El suizo Yann Sommer está a un nivel espectacular, probablemente en uno de sus mejores momentos en cuanto a rendimiento se refiere y como ha demostrado recientemente en la eliminatoria de Champions de semifinales frente al Barça y de las que ha salido victorioso y revalorizado, pero lo cierto es que ya tiene una edad, pasada sobradamente la treintena. Así, habrá que ver cuántas temporadas más le quedan por delante como titular indiscutible, atendiendo a que el grueso de su carrera la desarrolló ya en el Borussia Monchengladbach, junto a un breve paso posterior por el Bayern de Múnich para cubrir una lesión de larga duración de Neuer y recalar hace escasas temporadas en Milán, donde se ha afianzado prácticamente desde su llegada y sin crear prácticamente ningún tipo de dudas sobre su solvencia y eficacia.

En este contexto es donde emerge la figura del actual portero suplente, procedente del Génova hace dos años por un montante de 15 millones de euros y que lleva por nombre Josep Martínez, natural de Alzira y que pasó por la cantera del Barça en edad juvenil, para después salir hacia el filial y primera plantilla de la UD Las Palmas y más tarde fichar por el Leipzig. Allí las cosas no salieron como era de esperar, se optó por una cesión hacia Italia que, a la postre, ha parecido decisiva. El Génova decidió quedarse con el cancerbero valenciano, que en el verano de 2023 hizo las maletas rumbo a Milán.

Martínez, de 1,91 de altura, buen juego aéreo, desenvuelto con los pies y también ágil bajo palos fue habitual de la Sub-21 e incluso, según leemos, llegó a debutar algo más de veinte minutos en un partido con la selección española absoluta frente a Lituania. Tiene 26 años y, en general, todos los comentarios y valoraciones parecen ser muy positivos.

De este modo, el técnico Simone Inzaghi, tras debutar con el Inter en partido de Serie A este pasado mes de febrero por lesión de Sommer en un entrenamiento, reconoció que lo venía haciendo muy bien y que era justo premio a todo lo que venía demostrando durante este tiempo. Le calificó, dando muestras a priori de por donde podrían ir los tiros en el futuro, como «un excelente» guardameta. Josep Martínez ya había jugado en Coppa y también lo hizo en los octavos de la Champions contra el Feyenoord, con victoria por 2 a 0.

Años atrás, en su etapa en el Alzira llegaron a oídos de Barça, Valencia, Villarreal y Altético de Madrid, la existencia de un portero de buenas condiciones en el juvenil B del Alzira, que todos quisieron incorporar a sus canteras. El equipo azulgrana fue el elegido por el guardameta, del que se dice que inicialmente lo pasó mal para adaptarse al estilo del club catalán, aunque le sirvió, según palabras del propio portero, para mejorar mucho en el juego con los pies. Sus ídolos, ambos porteros del Valencia, fueron dos referentes en su momento del equipo ché y del fútbol español como Zubizarreta y Cañizares; los dos, muy distintos pero de gran calidad. El futuro de Josep Martínez también podría apuntar, como el de sus ídolos, a cotas muy altas. //