Fernando Pacheco: un buen portero con dos descensos consecutivos a Segunda

La vida da muchas vueltas y no siempre es acorde al rendimiento o las capacidades de cada uno. Fernando Pacheco, buen guardameta que pasó por las categorías inferiores del Real Madrid llegando incluso al primer equipo, ha cosechado en dos campañas consecutivas, con Alavés y Espanyol, sendos descensos a Segunda. Una circunstancia algo inusual, poco frecuente en el deporte profesional, y que probablemente poco tenga que ver con el nivel y aptitudes de este cancerbero extremeño de 31 años (2023).

Con el Espanyol tuvieron opciones de permanencia hasta la penúltima jornada, cuando se confirmó el descenso matemático. Pacheco había llegado, traspasado por tres millones de euros y contrato hasta 2026, en el mercado de invierno procedente del Almería, donde había jugado poco, bajo las órdenes de Rubi que no coontaba demasiado con él. Llegaba al club catalán para reforzar una posición en el campo donde los blanquiazules no habían conseguido la solidez y consistencia necesaria desde el inicio de la campaña 22/23 y con el objetivo, plausible por entonces, de garantizar la permanencia en la máxima categoría.

Al final, pese a los cambios en el banquillo y también en el estilo de juego, más ofensivo y propositivo en la parte final del campeonato, los resultados no llegaron y el peor de los escenarios acabó por concretarse. Pacheco, en cualquier caso y en líneas generales, se hizo con el puesto rápido -el francés Lecomte volvió hacia su país y Álvaro Fernández perdió protagonismo sobre el césped- y los resultados en un inicio fueron prometedores. Las cosas, de todos modos, no tardaron en torcerse y el pesimismo se expandió pese a los esfuerzos por creer en la gesta.

El guardameta disputó una quincena larga de encuentros pero no consiguió acabar con al debilidad defensiva, que sumada a las dificultades para crear juego, fueron dos de los talones de aquiles del equipo. De cara a la próxima campaña (23/24), algunos medios que siguen la actualidad del Espanyol confirman la continuidad del arquero en Segunda. Otros, en cambio, apuntan que podría ser un buen momento para ofrecer la oportunidad a un canterano con proyección, como es el caso de Joan García, a quien ya se han dado algunos partidos pero que todavía tiene mucho recorrido por delante para afianzar lo apuntado en las categorías inferiores.

Pacheco, en un momento profesional idóneo para un portero, con 31 años, experiencia y todavía con varias temporadas por delante para rendir a gran nivel, llegó incluso a sonar durante su larga etapa en el Alavés (siete campañas) para ir convocado con la selección española. De hecho, ésta fue una pregunta o cuestión que se puso sobre la mesa en más de una y de dos ocasiones con motivo de las convocatorias internacionales e, incluso, su nombre salió a la palestra como uno de los tres posibles guardametas para estar en la lista de los últimos mundiales o eurocopas. En pocas palabras, por lo tanto y de forma genérica, se le situó entre los mejores cancerberos españoles del momento.

Ahora le ha tocado vivir la cara menos amable del fútbol: dos descensos, que son experiencias duras, dolorosas, no solo para los propios jugadores sino por la tristeza sufrida por muchos de los seguidores, que se llevan un gran disgusto. Con Pacheco habrá que ver cuál es la decisión final del extremeño: quedarse y cumplir el contrato, con el objetivo de volver lo antes posible con el Espanyol a la máxima categoría; o irse y buscar minutos en otros equipo en Primera. Ambas decisiones, a priori, parecen razonables.

Por cierto y por su pasado en el Real Madrid, ha sonado como posible sustituto del ucraniano Lunin, que quiere dejar el club blanco, cansado de ser el suplente del belga Courtois. Él, junto a Soria, del Getafe, y el macedonio Dimitriveski, del Rayo Vallecano, han salido como posibles recambios para ocupar el banquillo del Real Madrid y tener contadas ocasiones de cubrir las ausencias del que está considerado, hoy por hoy, como uno de los mejores cancerberos del mundo.